La tecnología portátil se extiende por su movilidad y su atractivo diseño
Los portátiles están de moda. Han tomado en muchas casas la zona de trabajo sustituyendo al aparatoso ordenador de sobremesa. Como ocupan poco espacio y resultan manejables, se pueden trasladar sin dificultad y, además, su diseño atrae mucho más que las clásicas torres grises de los ordenadores convencionales. Sus precios están descendiendo y por un coste asequible ya se pueden encontrar modelos con capacidades muy similares a las de un ordenador medio. Por algo menos de 900 euros, por ejemplo, se pueden adquirir modelos de marcas reconocidas que permiten navegar por Internet, grabar y reproducir CD y DVD, jugar a determinados videojuegos y utilizar la mayoría de los programas que se emplean en los ordenadores de sobremesa.
Sin embargo, su coste es, por regla general, mayor que el de un aparato con similares características en su versión de sobremesa. Si se quiere utilizar el ordenador siempre en el mismo sitio, sale mucho más barato comprar uno convencional que, además, tendrá mayor capacidad y prestaciones. Si el usuario pretende trabajar con él y hacerlo en distintos lugares, el portátil representa una opción inmejorable.
Limitados por el peso y el espacio
Los ordenadores de sobremesa, como no tienen por qué moverse, no están condicionados por limitaciones de espacio y peso. Esto les permite albergar en su interior un número considerable de elementos, como tarjetas de sonido e imagen, lectores de CD y DVD, un procesador o un disco duro para almacenar los datos, entre otros. Además, los componentes pueden estar más alejados entre sí, con lo que la disipación del calor que generan por ser tan potentes resulta más sencilla. Por eso, a diferencia de un ordenador de sobremesa, la calidad de los componentes y de cómo estén ensamblados se convierte en algo esencial en los portátiles.
Los portátiles tienen que arreglárselas para meter todos estos elementos en un espacio de 20 centímetros de ancho por 30 centímetros de largo y 2,5 centímetros de grosor, es decir, las dimensiones de un maletín. Además, se considera que su peso máximo no debe exceder los tres kilos. Más allá de esta medida son poco transportables.
Además, no son tan portátiles. Necesitan una batería para poder funcionar en lugares tan dispares como el campo, la sala de espera de un aeropuerto o un vagón de tren, donde no es posible disponer de un enchufe, y la duración de las baterías no ha aumentado tanto como la voracidad energética de sus componentes. La batería es la que da independencia al portátil respecto de la red eléctrica, pero sólo dura tres horas como máximo (sobre todo, si hacemos un uso intensivo del equipo). Después hay que recargarla en una toma de corriente.
Cuestión de consumo energético.
La batería aparece así uno de los elementos más importantes de la tecnología portátil, y la rapidez con que el ordenador consuma la energía que ésta ha almacenado determinará su grado de autonomía.
Un portátil potente descargará la batería muy deprisa, por lo que resultará poco práctico. Es necesario, por tanto, que los diversos mecanismos que conforman el ordenador tengan un consumo equilibrado.
El procesador, la pieza clave del ordenador, es la que mayor consumo genera. En un ordenador de sobremesa se incluyen procesadores muy potentes, capaces de realizar muchas funciones complejas con rapidez. Pero estos procesadores, pertenecientes a la gama Pentium, descargarían la batería de un portátil en menos de una hora.
Los fabricantes de procesadores han tenido que desarrollar una tecnología paralela que permita a los portátiles ejecutar muchas funciones sin un gasto de energía desmesurado, e incluso ralentizar al equipo cuando sea necesario sacrificar prestaciones por autonomía. El resultado fueron en su día los procesadores Centrino, en la actualidad superados por los de la gama Celeron. Sin embargo, ninguno de estos procesadores alcanza las capacidades de un procesador Pentium 4, que son los que actualmente poseen los ordenadores de sobremesa. Aun así, con ellos se pueden llevar a cabo las funciones básicas de un ordenador y navegar cómodamente por Internet.
En el mercado se encuentran portátiles que pueden aumentar la potencia del procesador, pero siempre a costa de un mayor consumo energético. También se puede incrementar la autonomía con baterías supletorias, aunque se trata de accesorios engorrosos de transportar cuyo precio supera los 200 euros.
Para aquellos usuarios a los que les importe más el procesador que la autonomía energética se han creado los llamados 'portátiles de sobremesa', pensados para funcionar con la potencia de un ordenador convencional. Son muy caros -su precio supera los 2.000 euros-, pero permiten realizar las tareas más complicadas y jugar a los videojuegos más avanzados del mercado. Eso sí, siempre que haya un enchufe cerca.
La importancia de poderse 'conectar'.
Por definición, un ordenador portátil es aquel que se puede mover de un lado a otro sin excesiva dificultad: se puede trabajar con él en el sofá o en la cama sin que ello suponga trasladar el despacho entero. Pero esto no significa que no pueda estar conectado a otros aparatos que le aporten funcionalidad, como impresoras o altavoces, teclados o ratones externos (más cómodos), discos duros de mayor capacidad o a una toma de Internet. En algunos portátiles, los puertos USB, la conexión estándar para la mayoría de estos aparatos, son escasos (suelen venir dos) y están demasiado juntos. Para conseguir conectar todos estos periféricos con el portátil conviene adquirir un concentrador de USB, algo parecido al 'ladrón' de corriente eléctrica, que puede dar hasta 128 puertos USB de uno solo. No obstante, los puertos USB consumen mucha energía, por lo que tenerlos permanentemente en funcionamiento restará tiempo de autonomía al ordenador.
Otra característica a tener en cuenta a la hora de comprar un portátil será su capacidad de conexión, tanto a la Red como a otros aparatos periféricos, con independencia del sitio en que se esté. La mayoría de los portátiles que se venden actualmente llevan un adaptador a redes Wi-Fi que permite conectarse a Internet sin cables.
Esta cualidad es muy interesante cuando se quiere trabajar en lugares públicos, como cafés, que suelen ofrecer a los clientes acceso inalámbrico a Internet o en casa, si la conexión doméstica a Internet cuenta con un router wifi.
Es muy conveniente que el equipo incorpore la tecnología Bluetooth, que nos permitirá conectar el portátil a otros aparatos, como teléfonos móviles, impresoras o agendas electrónicas (PDA) sin necesidad de cables y en un radio muy corto de acción, apenas unas decenas de metros en el mejor de los casos.
Una enseñanza más portátil.
El mundo digital trae consigo la última tecnología portátil. Esta tiene una gran ventaja sobre la tecnología estática ya que permite llevar el conocimiento a cualquier lado. Por ejemplo, si un grupo de alumnos va al campo a tomar mediciones, juntar muestras, etcétera, para procesarlas después en el laboratorio de su colegio, estará sujeto a una pérdida de información, a una menor precisión, al deterioro de las muestras. En cambio en la era digital se pueden hacer mediciones confiables en el mismo lugar, obtener los resultados on line y hasta compartirlos inmediatamente si fuera necesario por correo electrónico.
Toda tecnología portátil debe estar acompañada de buenos sistemas de comunicaciones. Por ejemplo los teléfonos celulares actuales, muy prácticos y de gran difusión, nos permiten (cada vez con mejor calidad y mayor ancho de banda de comunicaciones) mantener la conexión en red mientras nos movemos o nos encontramos en lugares muy alejados. También muy útiles son los famosos pagers, que permiten recibir un mensaje escrito en cualquier lugar en forma discreta, no invasora. La tecnología celular más reciente permite también la combinación de telefonía y mensajería en un solo sistema, con ventajas evidentes. La telefonía celular satelital brindará, además, enormes beneficios cuando esté al alcance de todos. Algunas escuelas modernas se están familiarizando con estos equipos portátiles, especialmente para salir de excursión, pero pocas veces hacen un buen uso educativo de estos recursos. Es otra asignatura pendiente.
Si generalizamos esta idea de una "educación portátil" podríamos ampliar notablemente el ámbito natural del aprendizaje. Por ejemplo, en lugar de cuadernos, ¿por qué no emplear computadoras portátiles? En efecto, las laptop, (literalmente: computadoras para poner sobre la falda) se están haciendo cada vez más populares y económicas. Su capacidad es comparable a las computadoras de escritorio (desktop) y tienen ventajas muy notorias. Gracias a su movilidad nos permiten llevar todos nuestros trabajos de un lado a otro y al comunicarnos desde nuestra laptop por modem seguiremos conectados on line desde cualquier lugar. Pero las escuelas en general rechazan esta tecnología, siguen amarrando las computadoras a los bancos de trabajo, les cortan las alas. Sólo en casos excepcionales, para un alumno discapacitado por ejemplo, hemos visto que la escuela se atreve a abrir la jaula de las computadoras y le ofrece la alternativa más racional de una laptop. pero ¿por qué sólo para unos pocos? Nuestra experiencia de ofrecer computadoras portátiles para llevar a la casa, así como se pide prestado un libro en la biblioteca, es alentadora. ¡Ojalá se hiciera universal!
Hay también otros instrumentos denominados "asistentes personales digitales" (PDA, personal digital assistants) que son computadoras minúsculas que caben en la palma de la mano. Son en realidad verdaderas computadoras de bolsillo. Estos instrumentos portátiles forzarán a la escuela a trabajar en forma distribuida, sin horarios rígidos y desde cualquier lugar. En definitiva, la movilidad propia de la era digital tendrá un impacto tremendo en la práctica educativa. Todo confluye para liberar a la escuela de sus ataduras físicas actuales, para salir de sus cuatro paredes y de la página impresa.
La telefonía móvil, también llamada telefonía celular, básicamente está formada por dos grandes partes: una red de comunicaciones (o red de telefonía móvil) y los terminales (o teléfonos móviles) que permiten el acceso a dicha red.
El teléfono móvil o celular (designación usada en Hispanoamérica) fue inventado en 1947 por la empresa estadounidense AT&T, pero no se hizo portátil de manera práctica hasta 1983 cuando Motorola culmina el proyecto DynaTAC 8000X, que es presentado oficialmente en 1984. El DynaTAC 8000X pesaba cerca de 1 kg, tenía un tamaño de 33.02x4,445x8,89 centímetros (13 x 1,75 x 3,5 pulgadas), y rendía una hora de comunicación y ocho horas en stand-by, con pantalla de LED.
El móvil consiste en un dispositivo de comunicación electrónico con las mismas capacidades básicas de un teléfono de línea telefónica convencional. Además de ser portátil es inalámbrico al no requerir cables conductores para su conexión a la red telefónica.
La telefonía móvil consiste en la combinación de una red de estaciones transmisoras-receptoras de radio (repetidores, estaciones base o BTS) y una serie de centrales telefónicas de conmutación de 1er y 2º nivel (MSC y BSC respectivamente), que posibilita la comunicación entre terminales telefónicos portátiles (teléfonos móviles) o entre terminales portátiles y teléfonos de la red fija tradicional.
PDA
Del inglés Personal Digital Assistant (Asistente Digital Personal), es un computador de mano originalmente diseñado como agenda electrónica (calendario, lista de contactos, bloc de notas y recordatorios) con un sistema de reconocimiento de escritura. Hoy día se puede usar como una computadora doméstica (ver películas, crear documentos, juegos, correo electrónico, navegar por Internet, reproducir archivos de audio, etc.).
MPEG-1 Audio Layer 3
Más conocido como MP3, conocido también por su grafía emepetrés, es un formato de audio digital comprimido con pérdida desarrollado por el Moving Picture Experts Group (MPEG) para formar parte de la versión 1 (y posteriormente ampliado en la versión 2) del formato de vídeo MPEG. Su nombre es el acrónimo de MPEG-1 Audio Layer 3.
Ordenador de a bordo
El ordenador de a bordo mantiene al conductor informado en todo momento sobre el consumo de combustible actual o promedio, mediante un display en el cuadro de instrumentos. Esta información es utilizada a su vez por el ordenador de a bordo para calcular la autonomía del vehículo con el combustible restante en el depósito. Este dato proporciona información vital que permite al conductor adoptar un estilo de conducción lo más eficiente y económico posible. También puede consultarse en cualquier momento información adicional relativa a la velocidad media o al tiempo total de trayecto.
Reproductor portatil
Disfrute de sus películas favoritas en vacaciones o en el coche con el reproductor de DVD portátil PET1030 de Philips. Este reproductor portátil posee una pantalla LCD de 10,2", es decir, 25,9 cm de diagonal para leer sus DivX y todos sus archivos MP3. Además, esta pantalla es giratoria a 180º, lo que le permite guardar el reproductor girando completamente la pantalla. El reproductor de DVD portátil PET1030 dispone igualmente de un puerto USB y de un slot de tarjeta SD para leer otros archivos y música. Por ejemplo, podrá visualizar sus fotos digitales en forma de diaporama escuchando al mismo tiempo sus canciones preferidas.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario